27 de febrero de 2011

Va de locos.

Y entre la gente, . Y tu suspicacia. Más que nunca.
Yo entre el riesgo y la rendición, y tú en tu aparente indiferencia. 
Siempre hay un poco de locura en la indiferencia, y más en una persona como tú.
También indiferencia en la locura, aunque me cueste para seducirte.
Ahora que te conozco un poco más te diré que sé como huele tu almohada, que sé que te encanto, y que te morirías por besarme otra vez, aunque fuera de nuevo a destiempo. Una noche de viernes sin sentido, por ejemplo. Pero esta vez, te besaría mil veces más. Y tú, me llevarías al fin del mundo
O quien sabe, a lo mejor es la última vez que cruzo tu puerta. Y mañana ni te acuerdas.

Aunque no nos engañemos. Si estás leyendo esto, es porque estás pensando en mí.

16 de febrero de 2011

Mecánica espiral.



Este año estaba lleno de planes. Y a día de hoy tu encanto aún no se ha rebajado a mi sonrisa de idiota.
No te pido más. Devuelveme lo que me debes, convertido en amor una noche. Una noche. De las miles de noches que vas a pasar en esta vida. Una. UNA. y después olvídame si quieres. 
Ayer lo aprendí. Que aunque respiremos el aire del mismo bar. No nos sabe igual.
Es tiempo que me debes. Por los besos que intentaste y no me diste. Algo te queda y lo sabes. 
Si no, mañana mismo abandono.
Dime que no te encantaría y me rindo, te lo juro.


2 de febrero de 2011

Cosas que nunca te he dicho.

Escribo obsesiones en noches largas. En las que daría lo que fuera por encontrarte otra noche y no dejarte ir.
En la que covertiría tus ebrías miradas en terremotos.
Escribo besos lentos que aún no me han dado. De los que tu suspicacia me devolverá algún día. Uno a uno todos los que prometimos.
Escribo noches que no hemos tenido. Escribo de obsesiones en general y de ti en particular. 
Escribo sobre cosas que nunca te he dicho
Sabes que me muero por ti desde que te conocí. Y puede que mañana me rinda y me olvide de ti.
Sabes que me sacas de quicio y que te encanto. O algún día, no hace mucho, te encanté.
Escribo sobre ti. Y tú lo sabes.
Bésame ya, que es cuando me apetece. No quiero esperar  y rendirme. Aunque seas un prototipo de hombre complicado y "aburrido".
Esto me hace pensar que no eres difícil, sólo que ya se me paso la oportunidad de seducirte . A veces pienso que ya va siendo hora de aterrizar. 

Tú que crees? 
yo me hice inmune a ti hace tiempo.

1 de febrero de 2011

Historias de amores.

Hoy os contaré una historia. 
Yo una vez me enamoré. Me enamoré tanto tanto tanto que las canciones de amor se quedaban cortas. Me enamoré tanto que no existía fuerza en el mundo que pudiera hacer que cambiara de opinión. Todo el mundo se enamora alguna vez. Y yo, yo me enamoré de ti. Me enamoré de tus detalles, me enamoré de tu sonrisa. Me enamoré del mes de octubre, me enamoré de nuestras noches infinitas. De tu magia. De tu ternura. Me enamoré de tantas y tantas cosas que nunca lograré recordarlas todas. Me enamoré de tus manos, de tus besos en la playa. De nuestros planes de futuro. De nuestros viajes en coche. Me enamoré de cada día tres. Si en ese momento, en el que hasta la canción más bonita del mundo no podía compararse con nuestros besos, si en ese preciso instante yo hubiera cogido ese tren, supongo que las cosas habrían sido diferentes.
Pero debemos aprender que el amor, como todo, se agota. Algunos dicen que el amor es eterno, y yo no dudaría en decirte ahora mismo te quiero. Porque te quiero y te querré siempre. Pero los besos ya no fueron  iguales desde que te fuiste la primera vez. Y me enamoré de los pros y de los contras. Me enamoré de todo. Hasta que al final, me dolió tanto que nunca más volvería a enamorarme. Recuerdo todo lo mágico que fue. Cuando aparecías en mi cama a las 03'03'03 de la noche con mil besos para darme. Y me decías lo bonita que era. Y me decías que me querías y que siempre siempre estaríamos juntos.
La vida dio como mil vueltas.  Y ahora desde aquí, recuerdo la parte bonita de nuestro amor. Que el mundo ya tiene muchas cosas feas como para recordar también la parte mala de la historia. En la que me vuelvo egoísta. En la que tu me olvidas primero. Luego yo te quiero. Luego yo te olvido y tu me quieres. Luego ya no siento tus besos y vuelvo a planear mi mundo quitando la palabra amor. Ay amor, cuánto te quise. cuánto nos quisimos. Pero la vida cambia y te sorprende como dicen muchos. Y ahora busco amor por los bares, aunque no lo pueda llamar amor. Lo busco y no lo encuentro.
Pero no quiero amor. Porque amor, ya tuve de sobra.
Y os cuento esta historia porque enamorarse es muy bonito.
Y yo lo hice.
Y ahora tengo una vida casi nueva. Pero mi historia está aquí conmigo, aunque ya haya sido escrita y pueda escribir miles de historias nuevas. Pero hay cuentos que nunca se olvidan. Y este, es uno de ellos.



 Y ahora en mis planes hay muchas otras cosas...

 
 

Entradas